Siempre por estas fechas me ocurre lo mismo: noches sin dormir, preocupaciones, trabajo, problemas… y pienso ¿Qué haría si me tocaran 3000 millones de euros? (por poner una cifra).

Me lo paso bien, me divierte mucho repartirlo: qué le compraría a toda mi gente, amigos, familiares, qué les daría a los más necesitados… Bueno, intentaría que a todos les tocase algo, hasta a cada uno de vosotros que lee esto con una sonrisa en la cara. No os hagáis muchas ilusiones, es bastante improbable que me toque,  sobre todo porque no juego casi nada. Pero se lo recomiendo a cualquiera como entretenimiento, desde luego más entretenido y divertido que  pensar que tienes un camión o un coche y atropellas a todo el que se lo merece, aunque eso también tiene su gracia.

¿Y,si después de cuatro años sigues siendo inmensamente rico y has comprado los coches, las casas de tus sueños, y has viajado y regalado todo lo imaginable y lo que no lo es? ¿A qué dedicarías todo ese tiempo libre que rebosa en tu vida al dejar el trabajo?

Cada uno de nosotros tendrá sus proyectos personales. Los míos son muchos pero el más importante de todos es ser buena persona: ayudar en todo lo que sepa y pueda a los demás, no hacer a nadie lo que no quiero para mí; apoyar a todos esos niños con necesidades especiales a quienes no les llega toda la ayuda que necesitan por falta de tiempo o desconocimiento, no olvidarme de nuestros mayores que tanto han sacrificado por cada uno de nosotros y, sobre todo, compartir. Sí, compartir con familiares y amigos momentos mágicos de celebraciones, sentarnos alrededor de una mesa y pasar los mejores momentos, sin importar que sea millonaria o no. Aquí os dejo esta sincera reflexión y, si algún día sois millonarios, acordaos de compartir una buena merienda, comida o cena con los vuestros, con quienes os quieren sin condiciones, y de nosotros: Cafetería Mayri que estaremos encantados de acogeros. Y si no os hacéis millonarios…. También, que aquí estamos para lo que queráis. ¡¡¡FELIZ AÑO PARA TODOS!!