Para muchos el CAPPUCCINO, es su café preferido y en muchas cafeterías te lo preparan, pero casi nadie lo conoce realmente.

Se dice que el origen de cappuccino lo encontramos en México una de las cunas del café y el origen del nombre está en el “latte macchiato” así lo llaman en estas tierras y en Italia le dieron el nombre de “capuccino” que es como lo conocemos.

En muchas cafeterías el cappuccino te lo preparan en una copa transparente, con una capa de leche y otra de café expresso, un montón de espuma blanca y por encima polvo de canela, y a esto le llaman cappuccino, que gran error.

El cappuccino de verdad se sirve en una taza de 6 onzas (180 ml) es decir no hay tamaños, está es su taza. Por otro lado la carga de café expresso en la taza debe ser de 30 ml y la leche debe ser cremada al vapor, que no espumosa. De tal forma que cuando se integran el café y la leche tiene que tener una textura suave o sedosa a nuestro paladar.

La leche no tiene que estar hirviendo, su temperatura no debe exceder de 77º grados, por lo tanto es un café tibio, de tal forma que cuando servimos el cappuccino solo tenemos que esperar muy poquito y ya podemos bebernos nuestro cremoso cappuccino, si lo dejamos esperar perderá todas sus propiedades.